
Esperanza 
      y resistencia en Honduras 
      Por Amy Goodman 
      
Mientras 
      en Estados Unidos se conmemoraba el Día de los Caídos con 
      un fin de semana largo, el pueblo hondureño vivía un acontecimiento 
      histórico: el regreso del Presidente Manuel Zelaya, 23 meses después 
      de su exilio forzado a punta de pistola en el primer golpe de Estado en 
      Centro América en 25 años. Si bien Zelaya ya no es presidente, 
      su regreso pacífico es una gran victoria para el movimiento de resistencia 
      al golpe.
Honduras volvió a la OEA. Gracias a la gestión de Venezuela y Colombia, el país centroamericano retornó a la organización continental de la que había sido expulsado a instancias de Argentina y Brasil por el golpe de Estado.
Zelaya volvió a su Patria.
      En una jornada histórica, el Presidente de Honduras derrocado dos 
      años atrás fue recibido por miles de ciudadanos.
El acuerdo para el retorno de Zelaya.
Los preparativos del retorno del 
      Presidente legítimo.
      
      COBERTURA TV MUNDUS
      
      28, Mayo 2011. 
      ESPECIAL. Zelaya volvió a Honduras. 
      Programa dedicado al discurso al pisar nuevamente el territorio de su patria. 
      
Zelaya 
      vuelve al poder.
      
La 
      visita de una delegación norteamericana del más alto nivel 
      fue determinante para que el gobierno de facto de Roberto Micheletti admitiera 
      que debía restituir en el poder al Presidente constitucional Manuel 
      Zelaya, quien se encontraba refugiado en la Embajada de Brasil en la capital 
      hondureña. La salida acordada por las partes fue delegar la normalización 
      de la situación en el Congreso.
      El Ejército comienza a retirarse.
Zelaya 
      está en su país.
      El Presidente constitucional reingresó a su territorio y la dictadura 
      rodea la casa diplomática mientras exige a Lula que entregue a "Mel". 
      Militares leales habrían sido los autores de la arriesgada medida 
      que pone en aprietos al dictador Micheletti.
Asedian la Embajada brasileña en Tegucigalpa.
Detuvieron a Dionisia Díaz y la periodista Agustina Flores.
Honduras echó a diplomáticos argentinos. El gobierno de Fernández no reconoce expulsión por ilegitimidad de autoridades de facto.
La dictadura hondureña censura medios. Radio Globo y Radio Progreso ya no llegan al mundo por internet.
Los 
      días consolidan la dictadura.
      Cada día que los militares de Micheletti permanecen en el poder se 
      estabilizan en el poder.
Zelaya 
      en la frontera.
      El Presidente acampa en el límite de su país con Nicaragua 
      esperando el momento en que la dictadura no resista la presión. Los 
      golpistas le ofrecieron a su familia salir del país y los miembros 
      del Mercosur condenaron enérgicamente al poder de facto. 
    
Falla 
      la mediación de Oscar Arias y se estanca el proceso.
      Creen que cada día que pase se debilitará la resistencia democrática 
      contra el golpe conservador de las clases altas y los militares.
Oscar Arias será el mediador entre Zelaya y los golpistas. La gestión la realizó Hillary Rodham que advirtió a Micheletti que la Casa Blanca no los apoyará
No 
      permitieron el ingreso de Zelaya al país. 
      Los militares cruzaron vehículos en la pista del Aeropuerto de Tegucigalpa, 
      desviando ese avión y al argentino Tango 01 que llevaba a otros tres 
      Presidentes. 
Conferencia 
      de Presidentes en El Salvador.
      Tras el fallido retorno, Zelaya, Fernández, Correa y Lugo ofrecieron 
      una entrevista con la prensa internacional.
Represión 
      y primeras muertes.
      Los seguidores del Presidente constitucional fueron atacados por el Ejército 
      y ya hay dos muertes oficiales y decenas de heridos. Aún no se puede 
      saber la cantidad de desaparecidos.
Insulza volvió de Honduras y la OEA debate. No tiene la fuerza inicial para combatir el golpe a la democracia que dieron los militares centroamericanos.
Suspenden 
      derechos civiles. Hay mas de 400 desaparecidos y rige el 
      estado de sitio, habilitando la represión indiscriminada y la violación 
      de los Derechos Humanos.
La prensa monopólica apoya el golpe. Los grandes monopolios apoyan el golpe de Estado de la Oligarquía.