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Tragedia en Osetia del Norte.

MOSCU.- En la ciudad de Osetia del Norte, ubicada en una zona llena de conflictos étnicos que se han potenciado desde la caída de la Unión Soviética, veinte militantes separatistas chechenos tomaron un colegio con 1.500 personas en su interior (la mayoría niños pequeños que concurrían a su primer día de clase). Una explosión en su interior desató la recuperación del lugar por las fuerzas de seguridad con un saldo trágico de casi 200 muertos y cerca de 700 heridos.
Las trágicas escenas le dieron final a los peores tres días que recuerde la Rusia contemporánea, mas allá de que la presión de los que pretenden la separación de Chechenia del gobierno de Moscú va en franco aumento. Diez días antes dos aviones se desplomaron a tierra fruto de sendos explosivos puestos en sus bodegas. La revelación del acto terrorista parecía superar la acción de los terroristas en ocasiones anteriores. Pero el ataque al colegio en el que se desarrollaba la primera jornada del ciclo lectivo (por lo que había una presencia no habitual de padres) superó todo lo hasta ahora visto.
Al ser en pleno verano, los tres días en los que los subversivos (perteneciente a un grupo denominado "viudas negras", compuesto por familiares de chechenos muertos en la resistencia) tomaron la institución, no permitieron el ingreso de alimentos ni agua, por lo que se agudizó el problema sanitario con consecuencias graves en los pequeños.
La mayor parte de los muertos se produjeron en el gimnasio, donde explotó una bomba ubicada en el techo. En el interior habían agrupado a cerca de 100 niños y algunos docentes (muchos de los cuales fueron asesinados al intentar parlamentar y proteger a sus alumnos).
Entre los pedidos de los terroristas se encontraba la independencia de Chechenia y la liberación de 22 rebeldes atrapados en los ataques a la vecina ciudad de Inguzetia.
El Premir ruso, Vladimir Putín no se mostró en público durante la crisis, y visitó el colegio una vez que habían concluido los sucesos. Caracterizado por su inflexibilidad y mano dura, se cree que los hechos debilitarán su imagen política, algo netamente secundario ante tanto dolor.

Agosto 2004-09-04 ©