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Por Andrés Pescara.
BUENOS 
      AIRES.- Los terratenientes agrupados en Federación Agraria, Sociedad 
      Rural Argentina, CARBAP y CONINAGRO instrumentaron un plan sedicioso para 
      desestabilizar a las instituciones democráticas. Corte de rutas, 
      desabastecimiento de ciudades, presión a los legisladores, gobernadores 
      e intendentes y no exportación para dejar al Estado sin recursos 
      buscan debilitar a la Presidenta Cristina Fernández. En el fin de 
      semana mantuvieron contactos con la oposición y con algunos sectores 
      del Justicialismo que tienen intereses agropecuarios.
      Mario Llambías, Luciano Miguens, Eduardo Buzzi y Alfredo De Angelis 
      movilizaron cien mil trabajadores de sus campos al Monumento de la Bandera 
      para hacer un acto opositor en el que se dieron el lujo de atentar contra 
      las instituciones democráticas. Buzzi, por ejemplo, dijo que el país 
      podría estar progresando, pero que los Kirchner son un obstáculo. 
      Incluso, mostró cual es el modelo de país cuando en un intento 
      descolgado alentó a los asistentes a que lo acompañen a cantar 
      Madres de la Plaza, el pueblo las abraza. El silencio fue espectral, 
      propio de quienes siempre apoyaron a las dictaduras militares y a los golpes 
      de estado. Los campesinos fueron uno de los sectores con mayor represión 
      durante los años de plomo.
      Dentro de las medidas, bloquearán las rutas, con las armas en sus 
      brillantes camionetas 4x4 como no dudan en afirmar. Las municipalidades 
      y los consejos deliberantes, así como los parlamentos provinciales 
      y el Congreso, serán bloqueados hasta que instrumenten las medidas 
      que ellos exigen. Como si fueran terroristas deciden quien pasa y quien 
      no, con la intención de que las ciudades pasen hambre. 
      Los dirigentes de Federación Agraria, comenzaron a amenazar a los 
      comerciantes que no se adhieran al paro de actividades que quieren llevar 
      a cabo en el litoral, paralizando las ciudades de Santa Fé y Rosario. 
      Algunos comerciantes dicen que el mensaje es si abrís, te quemamos 
      el boliche. Queremos caos, vamos a reventar todo, dicen 
      furiosos en la ruta los terratenientes que no se sienten cómodos 
      con un gobierno votado por los ciudadanos que les habla de redistribución.
      Agentes norteamericanos que actuaron en el intento separatista de los sojeros 
      de Santa Cruz en Bolivia y ahora se los ve en las inmediaciones de los piquetes 
      terratenientes, partirían a agitar a Beni en el vecino país 
      y volverían el próximo lunes nuevamente para comenzar una 
      escalada de desestabilización. En el acto de la derecha internacional 
      que se hizo en Rosario se habría arreglado el financiamiento del 
      caos pre-golpista por parte de la organización filo-terrorista USAID.
      Necesitamos un muerto y si es pobre mejor, dicen algunos agitadores 
      violentos de los terratenientes, ya que eso les permitiría avanzar 
      en el caos pretendido.
Mayo 2008-05-28
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