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GUATEMALA.- 
      Ciento cincuenta policías antimotines protagonizaron una violenta 
      represión contra 122 familias campesinas que desalojaron de la finca 
      estatal Los Pinos en la localidad de Fraijanes. Dos empresarios atacaron 
      con sus armas y custodia personal y secuestraron a dos dirigentas del Comité 
      de Unidad Campesina (CUC).
      Los integrantes de la fuerza de seguridad atacaron con la orden de echar 
      una familia por cada uno, sin escatimar si eran niños, ancianos 
      o mujeres los agredidos. El actual Presidente Álvaro Colom Caballero 
      ha iniciado una política de reparación pública hacia 
      la aciaga historia de represión que la historia del país ha 
      sufrido en el último medio siglo desde la caída de Jacobo 
      Arbenz a manos de Estados Unidos.
      Cuando luego de este hecho los manifestantes reclamaban en la calle por 
      la liberación de dos dirigentes del CUC, los gerentes de la empresa 
      Chabil Utzaj S.A., con armas propias y la custodia de su compañía, 
      secuestraron a las dirigentas María Martín Domingo y Fabiana 
      Ortiz, quienes fueron introducidas por la fuerza en una casa de las inmediaciones. 
      Luego se perdió el rastro de los mismos.
      El primer mandatario, que se hallaba en una gira por Estados Unidos, país 
      con el que tiene una altísima dependencia económica, prometió 
      buscar inmediatas soluciones a este tipo de hechos que por supuesto lamentaba. 
      Los manifestantes, reclamaban terrenos estatales sin destino, en manos del 
      ejército, para poder mitigar su desocupación y el hambre.
      Julio 2008-07-12
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